Hermosillo, Son.- La primera audiencia del proceso penal por el incendio en la tienda Waldo’s del centro de Hermosillo fue aplazada por determinación judicial, luego de que las defensas acreditaran no haber tenido acceso oportuno y completo a las carpetas de investigación. El juez ordenó reanudar la diligencia este viernes 26 de diciembre, al considerar que la Fiscalía del Estado no cumplió en tiempo con la entrega del expediente, requisito indispensable para garantizar el derecho a una defensa adecuada.
La audiencia inicial se extendió por más de cuatro horas en los juzgados orales del fuero común, ubicados a un costado del Cereso Uno. Durante ese tiempo, los abogados de los imputados señalaron presuntas irregularidades en las órdenes de aprehensión y en los cateos ejecutados en las horas previas, además de que parte de la documentación les fue entregada apenas una hora antes —o incluso minutos antes— del inicio de la diligencia. Ante ello, el juez concedió el diferimiento y mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva para los siete imputados detenidos.
El aplazamiento ocurre en el marco de una investigación que involucra a 25 personas imputadas, entre funcionarios y exfuncionarios estatales y municipales de la actual y pasadas administraciones, así como personal de la empresa Waldo’s, por su presunta responsabilidad en el incendio ocurrido el 1 de noviembre, que dejó 24 personas muertas —entre ellas un bebé en gestación— y más de 15 lesionadas.
En vísperas de Nochebuena, documentos judiciales integrados a la carpeta de investigación y confirmados por fuentes ministeriales dieron cuenta de la magnitud del caso. Durante la noche del martes y la madrugada del miércoles, la Agencia Ministerial de Investigación Criminal desplegó cateos simultáneos en distintos puntos de Hermosillo y cumplimentó siete de las 25 órdenes de aprehensión libradas por un juez penal.
De acuerdo con el expediente, las imputaciones se estructuran por niveles de responsabilidad. En el bloque principal figura José Martín M. En un segundo nivel aparecen Alberto José G. y José Luis A., este último también señalado por uso de documento falso e incumplimiento de un deber legal. Un tercer grupo incluye a Martín Eduardo D., Lizeth López G., Emmanuel V., Jesús Fabián V., Viviana M., Ernesto R., Jesús Ángel R., Armando C. y Jesús Fernando M., por conductas culposas y omisiones en el ejercicio de sus funciones.
En un cuarto bloque se ubican personas imputadas por incumplimiento de un deber legal, entre ellas Sergio Orlando F., Alejandro L., Roberto S., Santa Agustina A., José Eufemio C., Astarte C., Martín Manuel M., Carlos Jesús A., Juan Manuel G., Flor Rosa A., Joaquín R., Eduardo Alejo A. y Florencio D., quienes habrían participado en procesos de inspección, autorización o supervisión del inmueble.
Las indagatorias ministeriales sostienen que la sucursal operaba sin cumplir con la totalidad de los permisos vigentes en materia de seguridad y protección civil. Peritajes técnicos incorporados a la investigación analizan la posible explosión de un transformador eléctrico al interior de la tienda y la presunta falsificación de documentos oficiales, factores que habrían permitido la operación del establecimiento en condiciones de riesgo.
El fiscal general de Justicia, Gustavo Rómulo Salas ha informado que los peritajes revelan irregularidades de fondo, mientras que el gobernador Alfonso Durazo ha reiterado que el caso avanzará sin excepciones. El incendio ocurrió la tarde del 1 de noviembre, en vísperas del Día de Muertos y en un horario de alta afluencia por quincena, cuando la sucursal de Waldo’s del centro de Hermosillo se encontraba llena de clientes y trabajadores.
Una explosión seguida de un incendio se propagó en cuestión de minutos al interior del inmueble, lo que provocó escenas de pánico y una evacuación caótica. El saldo final fue de 24 personas fallecidas, entre ellas un bebé en gestación, y más de 15 personas lesionadas, convirtiéndose en una de las tragedias más graves registradas en la capital sonorense.
LA JORNADA
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