El Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano presentó a la SADER una propuesta integral para crear una Reserva Estratégica de Alimentos, un mecanismo nacional que permitiría estabilizar precios, fortalecer la soberanía alimentaria y reducir la presión que hoy ejerce Estados Unidos sobre la importación de granos básicos. La iniciativa, encabezada por su dirigente Yako Rodríguez, busca corregir de raíz el deterioro del modelo agroalimentario del país.
La reunión, realizada ayer con el subsecretario Cota Montaño, se convirtió en el primer pulso político entre productores y el gobierno federal. El Frente presentó un plan técnico y financieramente estructurado, con un valor aproximado de 100 mil millones de pesos, que permitiría a México blindarse frente a crisis de mercado y garantizar certidumbre a millones de familias productoras.
Rodríguez detalló que la reserva estaría integrada por 300 mil toneladas de frijol, adquiridas por el programa Alimentación para el Bienestar a 20 pesos por kilo; 10 millones de toneladas de maíz blanco y amarillo, pagadas a 7,200 pesos por tonelada; 1 millón de toneladas de trigo, a 6,500 pesos por tonelada; una reserva equivalente de sorgo, igualmente a 6,500 pesos por tonelada, y un fondo de 6 mil millones de pesos para la compra de LEOsAS y otros mecanismos operativos.
El planteamiento no solo responde a la crisis de precios que golpea al campo; también permitiría que México recupere margen de maniobra frente a condicionamientos externos. “Un país con una reserva estratégica tiene poder de decisión. Sin ella, dependemos de lo que dicten otros mercados”, explicó el líder campesino.
Tras escuchar la propuesta, el subsecretario Cota Montaño reconoció que no tenía facultades para resolver, lo que detonó la salida del Frente de la reunión.
“No vamos a seguir en mesas donde solo reciban papeles. Necesitamos hablar con quien pueda decidir. El campo no puede vivir de trámites”, insistió Rodríguez.
Sin embargo, horas después, la propia SADER corrigió el rumbo: el coordinador de Delegaciones contactó al dirigente para convocarlo a una reunión el próximo martes a las 12:00 horas, ahora sí a nombre del secretario.
El Frente asistirá a la reunión, pero no suspenderá la ruta de presión. Ese mismo martes habrá movilizaciones en carreteras, y si no hay acuerdos, el miércoles bloquearán definitivamente los accesos.
“El campo quiere diálogo, pero diálogo con soluciones. Nuestra propuesta está fundada, calculada y puesta sobre la mesa. Ahora toca al gobierno decidir si quiere un país con soberanía alimentaria o un país sometido a los mercados externos”, afirmó.
El “banco de alimentos” planteado por el Frente recupera funciones que en su momento realizó ASERCA, pero con mayor capacidad de reacción y visión estratégica para enfrentar ciclos de precios, especulación, sequías y crisis logísticas.
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