Chihuahua, Chih.– La Subdirección de Protección Familiar del DIF Municipal registró durante el último periodo la atención de 323 personas y la apertura de 173 expedientes por diversas situaciones que afectan a niñas, niños y adolescentes en la ciudad, informó su subdirectora, Gabriela Valdez.
Detalló que, del total de atenciones, se brindó apoyo a 101 niñas, 143 niños, 30 mujeres adolescentes y 46 hombres adolescentes. Explicó que aunque al DIF llegan casos de todo tipo —como violencia familiar o física—, el área preventiva se enfoca principalmente en omisiones de cuidado y situaciones de negligencia infantil.
Valdez señaló que en los casos en los que se detecta algún tipo de violencia, se activan de inmediato los protocolos correspondientes. “Tenemos la obligación de poner a disposición de la Procuraduría de Protección o de la Fiscalía, según sea el caso”, afirmó. Añadió que en el periodo reciente se atendieron 46 casos de violencia sexual, 64 de violencia física y 54 de violencia psicológica. También se registraron 21 reportes de niñas y niños localizados solos en domicilio, 112 por negligencia y 134 por omisión de cuidado. Además, se brindó apoyo asistencial en situaciones relacionadas con venta de droga, consumo (12 casos) y consumo de alcohol.
La funcionaria destacó la importancia del trabajo preventivo y los avances en la cultura de denuncia. “La gente ya denuncia, incluso de manera anónima. Antes no se hacía lo propio, pero ahora los protocolos se están aplicando y aún falta trabajar en ello”, apuntó.
Recordó que la Subdirección cuenta con un área de atención temprana en neurodesarrollo, creada para apoyar a madres y padres que desconocen si sus hijas o hijos presentan alguna condición como autismo o TDA. Esta área ofrece terapias de lenguaje y acompañamiento sin costo.
Valdez subrayó que cualquier ciudadano puede activar el protocolo intersectorial creado por SIPINNA estatal en caso de sospecha de una situación que vulnere a un menor. “La Ley General de los Derechos de Niñas y Niños obliga a denunciar. Vamos avanzando en el conocimiento del protocolo, pero lo más importante es creerles siempre a las niñas y niños. Las instituciones son quienes investigan, pero nuestra labor es canalizar de manera adecuada”, concluyó.
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