Chihuahua, Chih.- Con el fin de garantizar el derecho de las personas a decidir sobre los tratamientos médicos que deseen o no recibir en caso de enfrentar una enfermedad terminal o degenerativa, la diputada de Morena Jael Argüelles Díaz presentó este martes una iniciativa para crear la Ley de Voluntad Anticipada para el Estado de Chihuahua,
Explicó en entrevista que la voluntad anticipada se distingue de la eutanasia en que la primera se trata solo de decidir no tomar medicamentos en caso de enfermedades terminales, para esperar el curso natural de la vida, y en el caso de la segunda significa recibir algún proceso para terminar pronto con esta.
La propuesta busca reconocer el derecho a una muerte digna y regular el uso de cuidados paliativos, priorizando la autonomía, la dignidad humana y la proporcionalidad terapéutica, y a través de un documento o formato de voluntad anticipada, los pacientes podrán manifestar si desean evitar tratamientos que prolonguen su vida de forma innecesaria y optar por cuidados que mitiguen el sufrimiento físico y emocional.
De acuerdo con Argüelles Díaz, esta figura —ya vigente en 19 estados del país— ofrece certeza jurídica tanto a pacientes como al personal médico, al establecer claramente la decisión del enfermo y evitar responsabilidades legales. Chihuahua intentó legislar en la materia en 2011 sin éxito, por lo que la diputada consideró urgente retomar el tema para que el estado no quede rezagado.
La iniciativa también prevé la creación de un Registro Estatal de Personas Enfermas Terminales y Voluntades Anticipadas, administrado por la Secretaría de Salud, que concentrará los documentos y supervisará su cumplimiento; además, protege de sanciones legales a los médicos, que actúen conforme a la voluntad del paciente y contempla la objeción de conciencia, garantizando que siempre haya personal de salud no objetor para cumplir la decisión expresada.
La legisladora destacó que el tema no busca promover la muerte, sino respetar la decisión personal en situaciones donde la medicina ya no puede ofrecer una cura “se trata de un acto de humanidad, de respetar el derecho de cada persona a decidir sobre su propio cuerpo y su propio final. Esta propuesta responde no solo a una necesidad jurídica y de salud pública, sino también a un imperativo ético en favor de los derechos humanos y la dignidad de las personas", finalizó.
Hola, déjenos un comentario